Maestros

DOMINIQUE VALERA


KARATE:
Dominique Valera es una leyenda viva del Karate y el Full Contact que surgió en las competencias de la década del 70.
Valera nació el 18 de junio de 1947 en Lyon, Francia en una familia de inmigrantes españoles.
En 1960 comenzó a practicar Karate, pero su primer Arte Marcial fue el Judo. Su maestro de Judo fue Yves Folletote, segundo Dan de Judo, tercer Dan de Karate Shotokan y dos veces campeón de Francia y de Europa.
Después de seis años de práctica de Judo, Valera decidió comenzar a entrenar Karate. Rápidamente se adaptó al nuevo Estilo, e inmediatamente se destacó por su gran técnica.
Valera siempre se caracterizó por ser un luchador que prefiere atacar antes de defender, muchos de sus rivales fueron derrotados porque los golpes de Valera eran tantos que no les daba tiempo de cubrirse. Valera también tenía la 
capacidad de encontrar los errores del adversario, estudiaba a sus oponentes y entrenaba de acuerdo a las características del rival. Siempre hizo énfasis en el entrenamiento físico, complementaba su preparación con pesas, en esa época muchos competidores no entrenaban con pesas porque pensaban que no eran beneficiosas para el Karate.
Dominique Valera fue campeón del mundo por equipos en 1972 en París.
Estuvo cerca de ser campeón del mundo en la modalidad individual, pero fue descalificado por excesivo contacto en el combate contra Antonio Rivera de República Dominicana, Valera perdió el control y golpeó a un árbitro en los Campeonatos del Mundo de Karate de Long Beach, California. Por esta actitud es excluido de la Asociación Mundial de Karate (WUKO). Valera se sintió indignado por la injusticia del árbitro, lo acusó de favoritismo y le reclamó por su falta de respeto hacia él y su público.
El combate fue muy discutido, así como la actitud de Valera que aseguraba que no había aplicado contacto excesivo a su oponente.
Antonio Rivera se llevó la medalla de bronce, en el tercer puesto.
Valera era un veterano en lo que a torneos se refiere, cinco años antes de aquella competencia, había ganado la medalla de bronce en los Campeonatos del Mundo de Karate, empatando en la tercera posición con Tony Tullener.
Valera viajó varias veces a Japón, a las mejores Escuelas de diversos Estilos de Karate para entrenar y perfeccionar su Karate, en algunas fue recibido, en otras no por ser extranjero.


FULL CONTACT:
Después de los incidentes en Long Beach, se dedicó a difundir el Full Contact en Francia, antes había estado entrenando con Bill “Superfoot” Wallace en Memphis, Estados Unidos.
Valera conoció a Jacky Gerbet, experto en Karate y presidente de la Federación Francesa de Full Contact, creada en Lyon el 19 de mayo de 1978. Decidió unirse a la federación y continuar promocionando el Full Contact por toda Francia.
La amistad con Gerbet crece y Valera pasa a ser entrenado por él, Gerbet entrena a Valera durante los años 70, época del mayor desarrollo del Full Contact.
Dominique Valera es apodado “King”, el Rey, por su técnica impecable, velocidad y potencia. Tiene un currículo deportivo muy amplio e impresionante, entre Karate y Full Contact tiene más de 700 combates, 674 victorias, 17 derrotas y 10 nulos.
En Full Contact cuenta con 18 combates como profesional, 14 victorias y 4 derrotas, además de 4 Campeonatos de Europa. En Karate, fue Campeón de Francia en 1966, Campeón de Europa por equipos contra Bélgica en 1968, Campeón de Francia, de Europa por equipos, de Europa, en 1969. En 1970 se consagró Campeón de Francia, de Europa, segundo por equipos contra Alemania, medalla de bronce en Tokio. En 1971, Campeón de Europa. En 1972, Campeón de Francia en pesos pesados, Campeón de Europa, individual y por equipos, medalla de oro en Kumite por equipos en los Campeonatos del Mundo de París. En 1973, Campeón de Francia, peso pesado. En 1975, Campeón de Francia en peso pesado y open, Campeón por equipos contra Suiza.
En Full Contact, tiene cinco victorias en Estados Unidos, la mayoría de las veces que perdió fue por decisión de los jueces, o sea por puntos; muchas veces en decisiones muy discutidas.

Valera ha participado en algunas películas como: Cop´s Honor (1985), Terminus (1987), Let Sleeping Cops Lie (1988), Taulignan (2001), etc. También ha realizado combates de exhibición, por ejemplo contra su amigo Bill Wallace, demostrando que no ha perdido su técnica ni forma física.
Dominique Valera fue el primer exponente destacado del Karate y Full Contact de Francia, es uno de los pioneros en los deportes de contacto en el mundo. En la actualidad posee el octavo Dan de Karate y el octavo grado de Full Contact, aparte de ser uno de los maestros más reconocidos en Europa, sobretodo en su Francia natal.




PALMARES: 
Entre karate y full-contact tiene unas cifras de 701 combates, 674 victorias, 17 derrotas y 10 nulos. En full-contact tiene 18 combates profesionales, 14 victorias y 4 derrotas, además de 4 campeonatos de Europa.
Karate
1966
Campeón de Francia
1968: Campeón de Europa por equipos contra Bélgica
2º en campeonato de Europa contra Guy Sauvin
1969
Campeón de Francia
Campeón del Gran Torneo de los Estados Unidos
Campeón de Europa contra Gilbert Gruss
Campeón de Europa por equipos contra Reino Unido
1970
Campeón de Francia
Campeón de Europa contra Gilbert Gruss
2º en campeonato de Europa por equipos contra Alemania
Medalla de bronce en los campeonatos del mundo de karate en Tokyo, Japón, por detrás de Wada, Carnio, y empatado con Tullener
1971 : Campeón de Europa
1972
Campeón de Francia pesado
Campeón de Europa contra Kallenback
Campeón de Europa por equipos contra Inglaterra
Medalla de oro en kumite por equipos en los campeonatos del mundo de París, Francia contra el equipo de Italia
1973 : Campeón de Francia pesado
1975: Campeón de Francia pesado y open
Campeón de Europa por equipos contra Suiza
Full-Contact
5 victorias en EEUU
05.10.1976: Derrota a Basnight por ko en 2º round, en Paris
05.25.1976: Derrota a K. Back por ko en 1º round, en Paris
10.10.1976: Derrota a V. Safranic por ko en 1º round, en Vienna/Austria, Campeonato de Europa
12.08.1976: Derrota a V. Safranic por ko en 3º round in Zagreb/YU, Campeonato de Europa
06.04.1977: Derrota a Angelo Jacquot, abandono en 3º, Paris, Campeonato de Europa
06.00.1977: Pierde contra Skog, noruego, por ko en Marsella, Campeonato de Europa
00.00.1978: Derrota a Angelo Jacquot, ko en quinto round, Campeonato de Europa en Génova/Suiza
12.02.1977: Derrota a Mike Lambert, por ko en 3º round, Lyon
05.22.1978: Pierde contra Jeff Smith por puntos en 9 rounds, Campeonato del mundo de peso ligero, Paris
02.28.1979: Derrota a Angelo Jacquot por ko, en Madrid, Campeonato de Europa
03.22.1980: Pierde contra Dan Maracuso por ko en 3º round, Campeonato del mundo de peso ligero, Bruselas/Bélgica
11.00.1980: Pierde contra Flavio Galessi, Campeonato de Europa
00.00.1982: Derrota a Angelo Jacquot, por ko en el 3º round
Ha participado también en algunas películas como Cop's Honor (1985), Twist again in Moscow (1986), Terminus (1987), Let Sleeping Cops Lie (1988), Ainsi soit-il (2000) o Taulignan (2001) haciendo también algún papel en series de TV.

                                                                                



        
                                                      ANTONIO OLIVA


Nace el día 16 de febrero de 1948 en Lloret de Mar (Gerona).
Cae enfermo al año de nacer lo cual le obliga a guardar cama durante un período largo de tiempo. Aprende a caminar por segunda vez a los seis años de edad y debe utilizar un corsé metálico para mantenerse en pie.
Aprende de la agreste naturaleza que le rodea; la montaña y el mar le atraen con más fuerza que la escuela.
1958-1966, de 10 a 18 años
Cursa el bachillerato elemental en el Seminario-Colegio de Santa María del Collell entre 1959 y 1963.
Entra en contacto con el deporte escolar destacando en tenis de mesa, hockey sobre patines y fútbol. Brilla con luz propia dentro de todo tipo de actividad bien sea individual o colectiva.
Se inscribe en un curso de “Judo y Jiu-Jitsu” por correspondencia y empieza a entrenar de forma autodidacta.
1966-1974, de 18 a 26 años
Va a Madrid a estudiar Hostelería y Turismo volviendo regularmente a Lloret para ayudar a sus padres.
Termina el bachillerato superior en el Instituto Cardenal Cisneros y se matricula en Filosofía y Letras.
Aprende Hapkido con el Maestro Yong Hoon Cho quien será su profesor durante siete años consecutivos. Compagina la práctica del Hapkido con la de Taekwondo bajo las directrices del maestro Jae Won Kim.
Participa en competiciones de Karate (1970-1075) representando a España y ejerciendo de Capitán de la Selección.
1974-1994, de 26 a 36 años
Abandona los estudios de Filosofía y Letras para dedicarse de lleno a la práctica de las Artes Marciales. Ocupa el cargo de Director Técnico y Seleccionador Nacional de Karate desde el año 1975 al 1980.
Contrae matrimonio con Carmen Piferrer el día 19 de marzo de 1977 de cuya unión nacen 5 varones.
Dirige y enseña durante 20 años en su propia Escuela de Artes Marciales sita en Bravo Murillo 160 de Madrid.
Expande el Karate-Do por todo el mundo intentando elevar este Arte Marcial al rango de Ciencia. Funda el CICAC junto con sus compañeros Fernando Torres y Jesús Navarro. Investiga a fondo la competición de “Kumite”. Publica: Formalización del Karate Deportivo; Enciclopedia de las Artes Marciales; “Kata”, Revista científico-deportiva; vídeo, Aprenda Artes Marciales, y la Táctica en el “Shiai-Kumite”.
1994-2002, de 36 a 54 años
Da un cambio a su vida estableciendo un orden de prioridades claro y firme: primero, El Padre-Dios; segundo, la Familia, y tercero, el Trabajo.
Tiene la firme convicción de que El Padre no necesita intermediarios para relacionarse con sus Hijos toda vez que se mantiene respetuoso hacia otras formas de pensar.
Afronta sus compromisos desde una óptica universalista.
Se desvincula del Gimnasio de Madrid y de muchas otras actividades para dedicarse de lleno a expandir sus conocimientos por todo el mundo.
Fundamenta sus enseñanzas en que “alma, cuerpo y espíritu deben moverse al mismo tiempo y en la misma dirección”, éste es el contenido principal de su mensaje. Otorga a cuanto hace grandes dosis de humanismo y espiritualismo.
UNA VIDA REPLETA DE CONTRASTES
Vine al mundo en un rincón del Mediterráneo donde la vida, la luz y el color se manifiestan con todo su fulgor. En esta parte de la geografía española, la montaña y el mar comparten acantilados altivos y playas apacibles toda vez que una cúpula, ora azulada ora estrellada, contribuyen a dar al lugar su bellísimo nombre, “Laurel bañado por el Mar” (Lloret de Mar.) Allí nací, allí crecí y allí pasé mis años mozos. Sus tierras me enseñaron a guerrear y sus gentes a convivir y a amar.
Yo era de carácter tímido y de inteligencia limitada amén de huérfano de cualidades de valer, lo cual provocaba el que a mi padre le costara mucho dar valor a nada de lo que yo hacía mientras que mi madre lo recibía todo con inmensa ternura y benevolencia.
Quizá la nota discordante de aquella ajetreada infancia haya que buscarla y encontrarla en mi precaria salud. La polio y la tuberculosis, en complicidad con otras enfermedades de curación igualmente compleja, la habían tomado conmigo y no se apartaban de mí ni de noche ni de día…
Por prescripción facultativa fui internado en un colegio de montaña dirigido por religiosos. El choque fue brutal. Pasé de manejar el espacio y el tiempo a mi antojo a tener que supeditarme a las rígidas normas de un seminario-colegio a la antigua usanza. ¡Cómo envidiaba yo el revoloteo de las palomas torcaces en el bosque!. Si bien es cierto que mi espíritu acusó la falta de libertad y se sintió vivamente afectado por la pesada losa de los dogmas. Para colmo, el estudio se me hacía no sólo aburrido, sino costoso y fastidioso. El deporte era mi único aliado, tan sólo los recreos y los tiempos de ocio me resultaban atractivos y reconfortantes. Por no contrariar a quienes todo lo daban por mí, yo aceptaba sumisamente aquel suplicio…
Por aquel entonces, un amigo muy íntimo me habló de una forma secreta de combate llamada Karate. “En el puerto de Barcelona, la policía naval americana resuelve toda clase de conflictos con técnicas de Karate”, me dijo y se recreaba relatándome proezas (de las que circulaban por la ciudad condal) recargándolas de fantasías. Yo le escuchaba extasiado… ¡esto es lo que quiero aprender! Y se despertó en mi un interés enorme en dichas técnicas. Empecé a ver molinos de viento por todas partes y a imaginar batallas que sólo existían en mi volátil imaginación. Inscribirme en un curso de “Judo y Jiu-jitsu” por correspondencia y practicar por mi cuenta y riesgo fue todo uno. Eran mis primeros intentos por aprender algo muy mío y nada deje en casa. Hubo que pasar algún tiempo para que me diera cuenta de que Lloret debía seguir su camino y yo el mío. Entonces decidí desplazarme a Madrid con la excusa de estudiar Hostelería y Turismo y, a su vez, intentar aprender aquellas técnicas secretas de combate que tanto me atraía.
Cuando pisé por primera vez el gimnasio Fujiyama de Madrid supe que estaba donde debía, fue como un flechazo a primera vista. Corrían tiempos difíciles y debía moverme con discreción pues la lucha entre “obligación-devoción” y “tradición-modernidad” era grande en mi y en el entorno, obligándome a tomar decisiones rápidas e importantes tanto para mi como para mis progenitores…
Las primeras clases de Hapkido fueron agotadoras. Venga repeticiones; venga patadas y puñetazos en todas direcciones; venga caídas, llaves y proyecciones; venga golpes al saco y a la madera; venga combates contra uno, dos y tres adversarios; venga defensas contra palo, cuchillo o cualquier otro instrumento; venga poner a prueba los límites del cuerpo. Llegaba a casa exhausto. Al día siguiente volvía al gimnasio con fuerzas renovadas y nunca faltaba a clase, si acaso repetía dos o más clases dentro de un mismo día. Poco a poco. Muy lentamente, mi cuerpo y mi mente fueron adaptándose y superando todo tipo de barreras dando pie a que los primeros cinturones hicieran su aparición de forma natural y lógica. Mi profesor estaba encantado conmigo y yo con él. Cuando tuve una buena base en Hapkido, empecé a aprender Kendo y Taekwondo. Aquel ambiente, a caballo entre lo místico y lo guerrero, me fascinaba…
Mi primer encuentro con el Karate fue con motivo del 1.er Campeonato de España que se celebró en el INEF de Madrid. El destino quiso que yo ganara los cinco primeros títulos nacionales y, sin proponérmelo expresamente, me convirtiera en un ídolo para muchos practicantes. 
Por aquel entonces el Karate español estaba dividió en dos grandes facciones –Karate Coreano y Karate Japonés- la rivalidad era grande y los combates duros. La palabra de los “maestros” era ley por el solo hecho de ser orie ntales. A aquellos Campeonatos de España le sucedieron otros tantos de Europa y del Mundo, clasificándome subcampeón de Europa en una ocasión y obteniendo un quinto puesto mundial en otra. Así fue como pasé de una práctica totalmente silenciosa y anónima a verme inmerso en el fascinante mundo de la competición deportiva con todos los “pros” y los “contras” que ella conlleva.
Yo me sentía luchador que no competidor, ello propició el que pronto dejara la competición y me centrara en otras cosas, tales como, enseñar, investigar, publicar, etc…
Al poco de dejar la competición fui nombrado director técnico del Dpto. de Karate dentro de la Federación Española de Judo…
Los primeros pasos al frente de la dirección técnica del Karate español estuvieron cargados de grandes sacrificios y adversidades, lo cual en vez de amilanarme me enardecía y me empujaba a afrontar cada entrenamiento como si me fuera la vida en ello. Tras cinco largos años de trabajo apasionado y apasionante –y arropado por un excelente plantel de hombres de quienes guardo un imborrable recuerdo- contribuí a  que España se proclamara Campeona del Mundo de Karate sorprendiendo a propios y extraños. Con estos resultados mundialistas recién conseguidos dimití de mi cargo federativo y volví a quedar libre como el viento.

Por aquel entonces mi reputación como entrenador se sumó a la que ya
Opté por subrogarme el título de “Coach Internacional” y por especializarme en “Táctica Deportiva” con el fin de evitar enfrentamientos directos con mis compañeros de profesión y me lancé a la aventura de la vida sin más armar que la ilusión por seguir aprendiendo y el deseo de compartir cuanto llevaba aprendido hasta el momento. ¡Cuán aleccionadora y fructífera resultó esta etapa de mi vida!
En la actualidad soy profesor de Artes Marciales; ostento el 8º Dan de Karate-do, el 3º Dan de Taekwondo, el 2º Dan de Hapkido y el 1.er Dan de Kendo…



Los once últimos años de mi vida los he consagrado en cuerpo y alma al Libro. “Combate Supremo” es como un hijo más, una criatura con vida y personalidad propia… Tras todos estos años de incesante guerrear, mi espíritu ha encontrado la Paz y la Armonía que antes se le escapaba. Ahora, todo cuanto hago o dejo de hacer encuentra y tiene sentido, su sentido. Ahora, todo cuanto me rodea encuentra y tiene sitio, su sitio. Ahora, como muy bien se dice y se explica en la Obra, “todo, absolutamente todo, responde al Amor”.
Ésta es mi vida al día de hoy, “una vida repleta de contrastes”, contrastes que empecé vivenciando en un rincón del Mediterráneo y que poco a poco han ido haciéndose extensivos a muchos rincones del planeta.

Más adelante…, Dios dirá.